De eficacia demostrada, la ortodoncia lingual está indicada para corregir cualquier tipo de problema de oclusión: apiñamiento, mordida abierta, mordida cruzada, sobremordida, etc.
Por este motivo, su elección depende únicamente de las prioridades del paciente: será el método elegido por aquellos que relegan el factor económico a un segundo plano para dar prioridad al aspecto estético del tratamiento.
Los brackets linguales están indicados en aquellos pacientes que no desean que el aparato de ortodoncia interfiera de manera alguna en su vida.